Uno de los mejores consejos que me han dado nunca es no poner límites a la creatividad de mis pequeñas fieras.

Esto, que suena a obviedad, no es algo fácil de cumplir en esta sociedad que busca la perfección desde edades muy tempranas.

Hace algún tiempo, una profe me dijo que uno de ellos tenía no sé qué «problema» (ahora a todo se le pone un nombre) porque dibujaba por ejemplo una mano con seis dedos en vez de cinco, tuve que respirar y pensar que por encima de todo, prefería que la creatividad siguiera fluyendo.

Y es que para mi, en niños muy pequeños, es más importante fomentar la creatividad que forzar a que hagan las cosas perfectas.

Eso pasa también por dejarles que imaginen, construyan, que hagan sus propias manualidades buscando sus propios recursos en vez de guiarlos (y obligarlos) a hacer lo que se espera que hagan.

Hoy os quiero hablar de juegos para colorear a su gusto y, aunque la base viene hecha, los colores los inventan ellos.

Se trata de juguetes hechos de cartón como un barco pirata o (mis preferidas) unas cocinitas.

Pero lo verdaderamente importante es que lo hagan a su gusto, no buscando tener una caja preciosa sino una caja diseñada y coloreada por ellos.

Otra que me ha gustado es este castillo para jugar con sus muñecas o muñecos y que también deberán colorear.

Son de Villacartón.

No sé si hay algún sitio donde vendan todos los modelos.

Yo he encontrado la cocinita en eljuguete.es (9,95 euros) y el castillo en ladidacteca.es (14,95 euros)

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