Que Disney Pixar estrene una nueva película ya es, de por sí, una buena noticia. Pero si además tiene como director a Pete Docter ( director de una de las mejores películas de la casa, UP), la cosa no podía pintar mejor.
La semana pasada tuve el privilegio de verla antes de su estreno, y ya os adelanto que «Del Revés» (InsideOut), es una película que no se parece en nada a todo lo que hayáis visto anteriormente.
Por primera vez el apasionante mundo de las emociones llega a las pantallas para, de una forma magistral, atrapar a niños y mayores.
En mi caso, al privilegio de verla diez dias antes de su estreno, se unió la suerte de poder ver la película de dos formas distintas a la vez.
Me explico: Además de ver la película de forma consciente como cualquier otro espectador, pude participar en un «experimento» de neurociencia en el que, a través de varios sensores, un equipo de profesionales fueron examinando mis emociones al ver cada escena.
Aún no tengo resultados así que hoy me voy a centrar en la película y ya os contaré más sobre esta experiencia que promete ser apasionante…
«Del Revés» es una película sorprendente en todos los sentidos.
Cuenta la historia de una niña, Riley, y de las emociones que habitan en su cabeza, cuando se ve obligada a cambiar de ciudad por el trabajo de su padre.
Con la alegría, tristeza, miedo, ira y asco como protagonistas, la película va mostrándonos la importancia de saber gestionar las emociones, de los recuerdos esenciales, e incluso se atreve a mencionar de forma cómica el pensamiento abstracto (no os asustéis que estando Disney Pixar de por medio, está tratado de forma divertidísima).
El lugar donde habitan las emociones está recreado de forma espectacular y podemos ver las islas de la personalidad (una especie de boyas a las que agarrarnos cuando lo necesitamos), el almacén de recuerdos, y hasta el vertedero donde van a parar las cosas que olvidamos.
Allí está también el centro de control desde el que Alegría, Tristeza, Miedo, Ira y Asco toman decisiones que no siempre salen bien y que darán lugar a divertidas situaciones 😉
Se trata de una película MUY divertida, donde además de reirte, puedes dejar caer alguna lagrimita provocada por la ternura de los protagonistas.
No tengo duda de que la película os gustará muchísimo (en Estados Unidos ha pulverizado todos los records de taquilla) y que será de las que veremos una y otra vez, como pasa por ejemplo, con cualquiera de las entregas de Toy Story.
Como en cualquiera de las producciones de Disney, la película está pensada para que la disfrute cualquier niño, sea de la edad que sea (y por supuesto los adultos).
Así, mientras los más pequeñines aprenden sin darse cuenta a poner nombre a las emociones, los niños a partir de siete años comprenden un poquito mejor como todas las emociones sirven para algo y los que ya no somos niños (al menos por edad) disfrutamos como ellos, de las divertidas aventuras de los personajes, reflexionamos y despertamos nuestra empatía.
Puede que lo que más me haya gustado (y os aseguro que me ha encantado en todos los aspectos) sea el que «Del Revés» se atreva a plantear que hay que dejar aflorar las emociones y a valorar la importancia de la tristeza por ejemplo.
Creo que es una verdadera suerte que nuestros hijos puedan ver películas como esta y conocer sus emociones de una forma tan divertida y tan didáctica a la vez.
No dejéis de verla, tanto si tenéis niños pequeños como si son más mayores, de verdad.
Yo, sin ir más lejos repito la semana que viene!!!
Se estrena el 17 de julio.-