Creo que junto con la entrega de notas, deberían darnos un diploma o una especial mención a las madres.
Y no me refiero al tópico de lo fantásticas que somos y la de cosas que hacemos, eso lo vamos a dar por asumido. Me refiero al auténtico maratón, que superamos las madres en el último mes de colegio.
Mientras las hojas del calendario pasan más deprisa que nunca, los actos sociales infantiles se multiplican. No sé si soy la única que concentro más cumpleaños que nunca en el mes de junio, pero no pasan 3 días sin que la que os escribe esté buscando un regalo o llevando a los niños a la fiesta de uno de sus amiguitos. Y no es que no me guste, pero 3 en una semana es agotador.
Pero a los cumpleaños, se unen el festival de la chiquitina, el recital de coro, el partido de fútbol, la actuación de ballet, la entrega de notas de uno, la entrega de notas de otro… y las hojas del calendario van pasando.
Y la madre de las criaturas tomando pastillas para dormir porque lo de contar ovejitas, me puede hacer recordar que tienen que ir disfrazados a alguno de los eventos y quitarme de nuevo el sueño…
Este año, el ordenador que tengo dentro de la cabeza ha sido incapaz de asumir tantos eventos y si no llega a ser por un whatsApp de otra madre, la que os escribe se pierde una de las funciones…
Así que la última semana de junio (esa absurda semana sin cole que no sé quien inventó) me vuelvo hippie.
Tengo la suerte de poder organizar mi vida laboral así que no hay horarios. Se levantan cuando quieren. Sacan todos los lápices del mundo, los tiran al suelo, pintan, juega, se disfrazan, se pasan horas en la piscina, comemos cada día a una hora, en fin…
Soy consciente de que poco a poco volveremos a los horarios, que aunque flexibles, tiene que haberlos por el bien de la salud mental de esta madre, pero durante una semana, necesito vivir esta especie de vida salvaje y dormirme pensando en que mañana no tenemos planes…. aunque sea de momento.
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Es que creo que hoy los niños tienen una agenda propia, incluso si no están apuntados a ninguna extra escolar, estos últimos días de cole son intensos, I can relate!